Washington, D.C. – Richard A. Grenell, destacado diplomático estadounidense y ex embajador de los Estados Unidos en Alemania, así como ex vocero ante las Naciones Unidas, ha emitido un fuerte pronunciamiento en su cuenta de una plataforma digital, anteriormente conocida como Twitter, en relación con las recientes acciones del Departamento de Estado de EE. UU. en Guatemala, centrando sus críticas en la figura de Patrick Ventrell, actual encargado de negocios y embajador interino de la embajada de Estados Unidos en dicho país.
Patrick Ventrell, the U.S. Charge in Guatemala (Patrick used to work for me, he is an anti-conservative zealot) has even threatened the Constitutional Court magistrates, Congressmen and private sector leaders if they don't support/rule to protect the Progressive President-elect…
— Richard Grenell (@RichardGrenell) December 11, 2023
En su declaración, Grenell acusa al Departamento de Estado de “jugar políticamente contra los conservadores en todo el mundo”, y señala específicamente a Ventrell por su papel en las recientes tensiones políticas en Guatemala. Afirma que el Departamento de Estado está utilizando sanciones y visas como herramientas de poder, comparando estas acciones con lo que habría sucedido si la administración de Trump hubiera tomado medidas similares.
El ex embajador destaca varios puntos preocupantes en la situación guatemalteca, incluyendo:
- 8,000 afiliaciones falsificadas para constituir un partido de izquierda.
- La desaparición de 7,000 actas electorales.
- Más de 2 millones de votos no certificables debido a la ausencia de dichas actas.
- Acusaciones de lavado de dinero contra el presidente electo progresista y el líder del partido.
Grenell describe a Ventrell como un “fanático anti-conservador” y lo acusa de amenazar a magistrados del Tribunal Constitucional, congresistas y líderes del sector privado en Guatemala con “medidas extremas” si no apoyan o protegen al presidente electo progresista.
La crítica se centra en cuestionar el nivel de implicación del Departamento de Estado en el conflicto electoral de Guatemala, sugiriendo que se debería permitir al sistema guatemalteco manejar la situación. Grenell concluye instando al Congreso de EE. UU. a convocar a Ventrell para que testifique bajo juramento sobre su rol en estos eventos.