El presidente de Colombia, Gustavo Petro, reemplazó este lunes al comandante del Ejército, el general Luis Ospina, cuestionado por el deterioro de la seguridad y envuelto en investigaciones por el supuesto uso ilegal de los servicios de inteligencia.
Petro y el ministro de Defensa, Iván Velásquez, “han designado al Mayor General (r) Luis Emilio Cardozo Santamaría como nuevo comandante del Ejército”, dice un comunicado de esa cartera.
La nota no especifica las razones de la salida de Ospina, quien comanda esa institución militar desde la llegada al poder de Petro, en agosto de 2022.
El saliente general era fuertemente criticado por la oposición y expertos ante los constantes ataques contra la fuerza pública y la población civil por parte de grupos del narcotráfico y guerrillas como el ELN y disidentes de las FARC que no se acogieron al acuerdo de paz de 2016.
En el comunicado, el gobierno agrega que confía “en que la vasta experiencia y el liderazgo” del general Cardozo “serán fundamentales para continuar fortaleciendo la seguridad y defensa de la nación”.
Ospina afrontó varios escándalos como comandante del Ejército. En 2023 la Procuraduría, organismo que sanciona a los funcionarios en Colombia, abrió una investigación en su contra por supuestamente utilizar los servicios de inteligencia para fines personales.
Según denuncias de la prensa, el militar ordenó interceptar ilegalmente al profesor de inglés de su esposa por celos.
La semana pasada, medios revelaron que la misma entidad también lo investiga por supuestamente acusar falsamente a otro general de tener nexos con disidentes de las FARC. Por ese caso también se realizan pesquisas al subdirector del Batallón de Contrainteligencia Militar, Camilo Osorio.
Las Fuerzas Militares de Colombia acumulan más de medio siglo de guerra contra las guerrillas y otros grupos del narcotráfico, en un conflicto que deja por lo menos nueve millones de víctimas, en su mayoría desplazados y asesinados.