El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, ha sido acusado de violar la Constitución durante su discurso en la sesión solemne de conmemoración del Día de la Constitución. Sus palabras han suscitado críticas por favorecer abiertamente a su partido político, Movimiento Semilla, lo que pone en entredicho su respeto a las normas constitucionales.
El presidente Bernardo Arévalo dirigió un discurso al Congreso de la República en la sesión solemne con motivo del Día de la Constitución. Su intervención comenzó con saludos protocolarios a varias autoridades, pero generó controversia al destacar de manera especial a los diputados de su partido, Movimiento Semilla. Arévalo declaró: “Es un gusto para mí saludar a los honorables diputados y diputadas al Congreso de la República, en su recinto. Tanto a los de las distintas bancadas aliadas que hoy están integradas alrededor de la Junta Directiva, como a los diputados de las bancadas de oposición. Y de forma muy especial, a mis entrañables amigos, los diputados y diputadas del partido Movimiento Semilla, cuyo esfuerzo e integridad valoro tremendamente.”
Según el Artículo 182 de la Constitución de Guatemala, el Presidente de la República y los demás funcionarios del Ejecutivo tienen prohibido favorecer a partido político alguno. Esta disposición subraya la obligación del presidente de velar por los intereses de toda la población y de representar la unidad nacional. La mención explícita y elogiosa hacia los diputados de Movimiento Semilla ha sido interpretada como una violación a esta normativa.
El resto del discurso de Arévalo se centró en reflexionar sobre la historia democrática de Guatemala, la importancia de la Constitución como marco para la paz y la democracia, y los desafíos actuales que enfrenta el país. Destacó los logros alcanzados desde la implementación de la Constitución y exhortó a una colaboración entre los poderes del Estado para enfrentar los problemas de desarrollo, corrupción y desigualdad.
No obstante, la atención se ha centrado en su aparente favoritismo hacia Movimiento Semilla, lo que ha suscitado reacciones negativas entre diputados de la oposición y analistas políticos. Estos señalan que el presidente debería mantener una postura imparcial y evitar cualquier acto que pudiera interpretarse como un apoyo partidista, en cumplimiento con el mandato constitucional de actuar en representación de toda la nación.
El discurso del presidente Bernardo Arévalo en la sesión solemne del Día de la Constitución ha desatado un debate sobre la imparcialidad y el respeto a la ley por parte del mandatario. Las críticas se centran en su mención favorable hacia su partido político, Movimiento Semilla, lo que podría contravenir el espíritu del Artículo 182 de la Constitución guatemalteca. Este incidente resalta la necesidad de que los líderes políticos mantengan la neutralidad y actúen en beneficio de toda la población, respetando siempre el marco constitucional.
