El presidente Bernardo Arévalo ha anunciado una reestructuración significativa en su administración, incluyendo el nombramiento de Julio Enrique Flores Reyes como el nuevo Zar Anticorrupción. Este cambio ha generado controversia debido a la asociación previa de Flores Reyes con la administración de Alejandro Giammattei. En una conferencia de prensa el 15 de julio, Arévalo justificó la designación destacando la experiencia y formación académica del abogado y economista.
El presidente Arévalo informó en una conferencia de prensa que Julio Enrique Flores Reyes, abogado y notario con formación en economía y una maestría en Derecho Constitucional, será el nuevo jefe de la Comisión Presidencial contra la Corrupción. Flores Reyes ha sido parte de la Dirección Ejecutiva de la misma comisión durante la administración de Giammattei, lo cual ha suscitado dudas sobre su idoneidad y posibles conflictos de interés en su nuevo cargo.
Flores Reyes, de 34 años, se unió a la Comisión Presidencial contra la Corrupción el 18 de enero de 2021, inicialmente como Jefe del Departamento de Análisis Legal. Posteriormente, fue ascendido a Director de Rendición de Cuentas e Información Pública, con un salario mensual de Q28,125. Antes de su incorporación a la comisión anticorrupción, trabajó como Asesor Jurídico en la Coordinación de Asuntos Jurídicos del Tribunal Supremo Electoral (TSE) desde 2016 hasta su renuncia en marzo de 2020.
En su presentación oficial, Flores Reyes reafirmó el compromiso del presidente Arévalo y de la vicepresidenta Karin Herrera en la lucha contra la corrupción. Destacó que la labor de la comisión es “eminentemente técnica” y está estructurada en seis áreas estratégicas para construir el Sistema Nacional Anticorrupción. Su nombramiento, sin embargo, ha generado controversia debido a su pasado en la administración de Giammattei y las críticas hacia la efectividad de la comisión durante ese período.
