¿Está acaso Donald Trump hecho de kevlar o teflón? Sobrevivió a un ataque contra su vida, acaba de librarse de uno de sus tantos procesos judiciales, es nominado candidato presidencial y los mercados apuestan y ganan, augurando su victoria.
Se sacó de encima dos procesos de impeachment y es el único expresidente condenado penalmente por falsificación de documentos contables. Pese a que su barco parecía hundirse este magnate de 78 años se mantuvo a flote.
Inmerso en polémicas, algunos líderes mundiales lo han considerado un peligro para la estabilidad y contra la lucha para contener el cambio climático.
Aún así, numerosos sondeos predicen que será el ganador de las elecciones presidenciales de noviembre, cuando deberá enfrentar al demócrata Joe Biden.
Esta semana, 50.000 asistentes a la Convención Nacional Republicana en Milwaukee, lo proclamaron oficialmente como su candidato presidencial.
“Parece que está con buena racha”, dijo a la AFP un representante de Texas en la convención, Orlando Dona, quien viste un sombrero de vaquero.
Dona, de 64 años, cree, como muchos de los simpatizantes del expresidente, que los diversos casos contra Trump han tenido motivaciones políticas y que él está consiguiendo librarse de todo.
– Ayuda divina –
“¡Podría estar muerto!”, dijo el expresidente republicano, luego de que el sábado un tirador trató de asesinarlo con un fusil, durante un mitin al aire libre en Butler, Pensilvania.
Trump contó que giró su cabeza para leer un gráfico, y evitó sin querer que el tiro le pegue directamente. Solo quedó con la oreja derecha lastimada. Según él, fue Dios quien lo salvó.
Y, efectivamente, Scott Walker, ex gobernador de Wisconsin y candidato en las primarias republicanas de 2016, cree que “la mano de Dios” salvó a Trump.
– Su discurso –
El magnate ha evadido diversos males, gracias a su suerte, su astucia o sus abogados. Desde librarse del servicio militar obligatorio para la guerra de Vietnam en 1968 hasta pagos del impuesto sobre la renta en 2020.
Fue acusado de complacencia hacia pequeños grupos de extrema derecha, incluidos miembros del Ku Klux Klan, involucrados en la violencia en agosto de 2017.
Tuvo expresiones peyorativas contra Haití y contra países de África y se ha referido a los inmigrantes de América Latina como “violadores” y “bad hombres” (“tipos sucios”).
Incluso el movimiento #MeToo precipitó la caída de decenas de estadounidenses poderosos.
Pero a Trump no le pasó nada, a pesar de las múltiples acusaciones de abuso sexual, una condena en un juicio civil en 2023 por la agresión sexual a la escritora E. Jean Carroll y un presunto romance extramatrimonial con la actriz porno Stormy Daniels.
Y pese a un vídeo publicado por el Washington Post el 7 de octubre de 2016, en el que Donald Trump hace comentarios extremadamente degradantes hacia las mujeres, le valió perder apoyo de líderes de su partido pero igual ganó las elecciones un mes después.
– “El arco de la historia” –
Y ahora parece que logrará otro milagro, evitando tres de las cuatro demandas que enfrentaba antes de las elecciones. Este lunes, la justicia anuló el caso abierto contra él por mala gestión de documentos clasificados tras dejar la presidencia en 2021.
Mientras sus simpatizantes lo esperaban, los mercados parecían celebrar el lunes su sobrevivencia y apostaban a su victoria.
El bitcóin se valorizaba un 10%, a 63.270, su mayor nivel en dos semanas, mientras su compañía, Trump Media & Technology Group, ganaba un 32% en Wall Street.
“Si la historia de los últimos 18 meses nos enseña algo, es que se le pusieron muchos obstáculos al presidente Trump y el hecho de que los haya superado…”, reflexionó el empresario y excandidato presidencial republicano Vivek Ramaswamy.
“Parte de lo que me da fe en este país es que, como dijo Martin Luther King, el arco de la historia es largo, pero se inclina hacia la justicia. Y creo que eso es exactamente lo que está ocurriendo con el presidente Trump”, agregó.