El Ministerio de Desarrollo Social (MIDES) se encuentra en el centro de un escándalo tras la revelación de graves irregularidades en la adjudicación de subsidios para el transporte de adultos mayores. La controversia estalló luego de que diputados de la bancada Vamos, Héctor Aldana y Greicy de León, expusieran inconsistencias durante una fiscalización, incluyendo la adjudicación de contratos a una empresa creada solo 10 días antes del evento y que cuenta con un único autobús para atender las necesidades de transporte de más de 7 mil adultos mayores.
El MIDES organizó una conferencia de prensa de emergencia en respuesta a las críticas y cuestionamientos, pero las explicaciones brindadas dejaron más dudas que certezas. Según las investigaciones preliminares realizadas por los diputados, la empresa beneficiada con el contrato fue constituida apenas 12 días antes de la adjudicación y no cuenta con la capacidad logística necesaria para cubrir la demanda del programa.
En la citación previa realizada esta semana, el ministro Abelardo Pinto evitó comparecer ante el Congreso, delegando la responsabilidad de responder las inquietudes a sus viceministros. Esto obligó a los legisladores Aldana y de León a presentarse personalmente en las oficinas del ministerio, donde, pese a la ausencia de las autoridades principales, lograron dialogar con miembros de la junta adjudicadora y descubrir más anomalías en el proceso.
Conferencia de prensa sin respuestas claras
En la conferencia de prensa convocada de emergencia en el Palacio Nacional, el ministro Pinto, acompañado del comisionado contra la corrupción Julio Flores, justificó las irregularidades alegando que estas se debieron a modificaciones en el reglamento realizadas por administraciones anteriores. Sin embargo, no logró explicar cómo una empresa recién creada y con solo un autobús pudo cumplir con los requisitos para obtener el contrato.
Cuestionado sobre los más de 34 millones de quetzales del presupuesto asignado al programa y que no se han ejecutado, el ministro afirmó que serán distribuidos entre diferentes programas del ministerio. No obstante, evitó detallar los mecanismos específicos para su ejecución en las dos semanas restantes del año.
Dudas sobre el destino de los fondos
El anuncio de que los fondos podrían terminar en el fondo común del ministerio levantó serias preocupaciones sobre su destino final y si realmente beneficiarán a los adultos mayores, quienes son los más afectados por estas decisiones. Además, el manejo opaco de los recursos pone en duda la transparencia y la gestión del MIDES bajo la administración actual.