La comunidad de Totonicapán se encuentra consternada por el fallecimiento de un pastor local, quien tras ser diagnosticado con una enfermedad, no logró estabilizarse a pesar de los esfuerzos de su congregación y vecinos, quienes se unieron en una cadena de oración para su pronta recuperación.
El sábado, los restos del pastor fueron velados en la iglesia a la que asistía, en un ambiente de solemnidad y respeto. Durante la vigilia, familiares y amigos se reunieron para rendirle un homenaje póstumo, y se celebró un servicio religioso en su honor.
El sepelio del pastor se llevó a cabo la mañana del domingo 8 de diciembre en el Cementerio General de Totonicapán, donde fue despedido por los miembros de su comunidad, que lamentaron profundamente su partida. La pérdida de este líder espiritual deja un vacío en la congregación que lo seguía con devoción.