La selección nacional de Guatemala firmó una de las páginas más oscuras de su historia futbolística al caer 3-2 ante Guyana, en el partido de ida de las preliminares rumbo a la Copa Oro 2025. El resultado no solo representa la primera victoria de Guyana sobre Guatemala, sino que deja al equipo dirigido por Luis Fernando Tena al borde de una humillación histórica.
En un partido que se esperaba favorable para la Bicolor, la realidad fue otra. Isaiah Jones, atacante guyanés, se convirtió en la pesadilla del equipo chapín al marcar un triplete a los minutos 9, 36 y 56, dejando en evidencia las serias falencias defensivas del combinado nacional.
Por parte de Guatemala, José Martínez descontó al minuto 29, mientras que José Carlos Pinto, desde el punto penal al minuto 80, logró maquillar el resultado con el 3-2 final. A pesar del cierre del marcador, el papel de la selección fue pobre, dominada por un equipo que ocupa el puesto 154 en el ranking FIFA y que cuenta, en su mayoría, con jugadores sin experiencia profesional.
El encuentro expuso nuevamente la falta de identidad, carácter y efectividad de una selección que ha quedado estancada en el discurso de la reconstrucción, pero sin resultados tangibles. Los errores tácticos, la lentitud en la marca y la ausencia de liderazgo dentro del campo fueron evidentes durante los 90 minutos.
