El desfile de miles de creyentes y turistas para presentar sus respetos al papa Francisco terminó este viernes hacia las 17H00 GMT, una hora antes de que se cierre el féretro del jesuita argentino en una ceremonia privada.
Las imágenes de televisión mostraron cómo la capilla ardiente, instalada en la basílica de San Pedro, se vaciaba del gran público, mientras permanecían cardenales, sacerdotes y trabajadores de la Santa Sede. Su entierro tendrá lugar el sábado.