El vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, declaró el lunes que su «corazón está con los millones de cristianos» del mundo tras la muerte a los 88 años del papa Francisco, un día después de reunirse con el pontífice en el Vaticano.
«Me alegré de verlo ayer, aunque obviamente estaba muy enfermo», escribió en X Vance, convertido al catolicismo en la adultez, durante una visita a India.