El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, prometió el miércoles una “dura respuesta” a las dos explosiones que mataron a al menos 103 personas en el sur del país.
“Los malvados y criminales enemigos de la nación iraní volvieron a crear un desastre y martirizaron a un gran número de personas queridas en Kermán”, declaró Jamenei en un comunicado, añadiendo que “este desastre tendrá una dura respuesta, si Dios quiere”.