El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, rindió honores este lunes a los soldados estadounidenses caídos en conflictos en el marco del Día de los Veteranos, evento que marcó la primera presencia junto a la vicepresidenta Kamala Harris desde su derrota en las elecciones la semana pasada.
La ceremonia en la que Biden depositó una corona de flores en el histórico Cementerio Nacional de Arlington, en una de las márgenes del río Potomac frente a Washington, resulta también la primera vez que Harris se muestra en público desde que el 6 de noviembre reconoció en un discurso la dura derrota en las presidenciales frente al magnate republicano Donald Trump.
Biden recibió a oficiales castrenses retirados en la Casa Blanca para conmemorar el feriado antes de dirigirse a Arlington, el lugar de descanso final de dos presidentes, generales de las principales guerras de Estados Unidos y miles de otros militares caídos.
Biden y Harris, ambos vestidos con trajes oscuros, se pusieron las manos sobre el corazón antes de participar en una ceremonia oficial y colocar coronas de flores en la Tumba del Soldado Desconocido.
La ceremonia se celebra antes de que Biden reciba a Trump en la Casa Blanca el miércoles.
Los demócratas comenzaron a realizar un balance y ajuste de cuentas internos -incluso con acusaciones públicas- sobre lo que causó la derrota de Harris. Algunos apuntan a la insistencia inicial de Biden en mantener su nueva postulación a los 81 años, a pesar de haber prometido ser un presidente que oficiara de puente hacia una próxima generación del partido.
Las críticas a la propia Harris han sido más moderadas e incluso Biden la elogió el jueves pasado en un discurso televisado en la Casa Blanca.
Trump -quien fue presidente entre 2017 y 2021- ganó ampliamente las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, con el voto popular a su favor, ganando los siete estados claves y tomando control del Senado; ahora espera los resultados definitivos en la Cámara de Representantes