Moscú, Rusia – El presidente ruso Vladimir Putin ha advertido recientemente que la relación entre Rusia y Finlandia enfrentará “problemas” tras la entrada de Finlandia a la OTAN a principios de este año. En respuesta a esta nueva alineación de Finlandia, Rusia ha anunciado un refuerzo militar en su región noroeste.
Putin señaló que, aunque anteriormente no existían problemas significativos en las relaciones ruso-finlandesas, ahora emergen tensiones a raíz de la decisión de Finlandia de unirse a la OTAN. Esto representa un cambio drástico, ya que las disputas territoriales previas entre ambos países, especialmente las de mediados del siglo XX, habían sido resueltas hace tiempo.
Además, el presidente ruso anunció la creación de un nuevo distrito militar en la zona noroeste de Rusia, que se denominará “Leningrado”, en una región adyacente a Finlandia. Este movimiento estratégico implica la concentración de ciertas unidades militares en esta área. Este anuncio sigue a la decisión de Finlandia de abandonar su política de neutralidad militar y unirse a la OTAN, especialmente después del inicio de la agresión rusa a gran escala en Ucrania.
A pesar de estos movimientos, Putin enfatizó que Rusia no tiene interés en enfrentarse militarmente con la OTAN, y negó cualquier intención de conflicto geopolítico, económico o militar con los países miembros de la alianza. Sin embargo, acusó a la OTAN de ser el “patio trasero” de Estados Unidos.
En un contexto relacionado, Finlandia ha cerrado su frontera con Rusia, acusando a Moscú de provocar una crisis migratoria debido al incremento en la llegada de migrantes indocumentados.