El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de Guatemala ha presentado una serie de reformas importantes a la Ley Electoral y de Partidos Políticos (LEPP), con el objetivo de implementarlas en los próximos comicios. Esta iniciativa, entregada al Congreso por la presidenta del TSE, Blanca Alfaro, busca modernizar y fortalecer el sistema electoral guatemalteco.
Después de casi siete meses de trabajo, la Comisión de Actualización y Modernización Electoral (CAME) ha concluido su labor, resultando en la propuesta presentada este miércoles 17 de abril. Alfaro destacó la necesidad de evitar la judicialización de los procesos electorales que, según ella, solo contribuye a debilitar la democracia y deslegitimar a las organizaciones políticas.
En su intervención, Alfaro expresó la urgencia de cambiar las reglas actuales para no criminalizar a los ciudadanos que desean participar en las elecciones. Además, propuso la creación de dos nuevos entes dentro del TSE: el Tribunal Contencioso Electoral, que se encargaría de resolver conflictos relacionados con los partidos políticos, y el Consejo Electoral, enfocado en los asuntos administrativos.
La presidenta del TSE enfatizó la importancia de estos cambios para garantizar la autonomía del organismo electoral y el fortalecimiento del padrón electoral. El Congreso, representado por su presidente Nery Ramos, ha prometido una rápida revisión del proyecto para su pronta discusión y posible aprobación.
Para esto no hay pacto de corruptos. La traviata de que es para modernizar un organismo del Estado, en este caso evidente no es más que lograr impunidad. Primero los magistrados actuales deben de renunciar y someterse a la ley. Como bien dijese uno de los prófugos “el que nada debe nada teme.