El presupuesto público es un instrumento político; es decir, una herramienta para lograr objetos políticos, no politiqueros. Los objetivos políticos de la función pública están llamados a lograr una coordinación armónica de las instituciones públicas con los agentes económicos de mercados.
Llegar a formular esos objetivos políticos en un escenario de economía mixta y dentro de un sistema político dominado por la relevancia de los partidos políticos, en teoría es una tarea posible, pero con la premisa de una alineación de los intereses entre los partidos políticos, instituciones públicas y agentes económicos de mercado, se torna en un ejercicio arduo. No obstante, es el ideario de las llamadas democracias en la esfera occidental. De hecho, criterios que se vuelven aspiracionales y calificativos del buen gobierno.
El logro de los objetivos políticos de la función pública se manifiestan en el presupuesto público y año con año se pueden llevar acciones que permiten avanzar en el logro de tales objetivos políticos que luego permite realizar mediciones de mediano y largo plazo y que estos se traduzcan en alcanzar un mejor nivel de vida para los guatemaltecos.
Aunque el presupuesto público en Guatemala tiene varios criterios para medir el avance del mismo, la metodología del presupuesto por resultados aporta criterios cualitativos para medir el cumplimiento de los objetivos políticos de la función pública; no obstante que según el Ministerio de Finanzas Públicas en su sección de Metodología de Gestión por Resultados dentro del proyecto de presupuesto 2024, señala unos valores que comparado con el presupuesto finalmente aprobado, desde el año 2020 al 2024, han representado una proporción del 13.9%, 13.3%, 15.0%, 16.0% y 16.5% respectivamente. Es decir, para medir cualitativamente el presupuesto de gastos, las asignaciones presupuestarias no superan el 16.5% del presupuesto total que para este año está formulado por el orden de los Q 116.7 millardos.
El criterio más popular en Guatemala para medir el logro de objetivos políticos del sector público, se valora en términos de la ejecución presupuestaria; es decir, el valor pagado a determinada fecha respecto a lo programado o autorizado por el congreso para determinados rubros. De ahí que compartiré con ustedes que del total de presupuesto autorizado anualmente, al mes de abril del presente año, la ejecución del presupuesto de gastos ha alcanzado el 28.38% equivalente a Q 32,853.4 millones, el cual se puede comparar con el nivel de ejecución de los últimos cinco años si se considera una ejecución del 28.41% para 2019, 23.97% para 2020, 25.33% para 2021, 27.47% para 2022 y 30.78% para 2023.
El 28.38% de ejecución al 30 de abril de cada año corresponde al presupuesto total de gastos, aclarando que sería deseable que el 100% del presupuesto fuera gestionado a través de programas por resultados; recordemos que para el presente año, solamente el 16.5% de los Q116.7 millardos se gestiona en esa categoría. En tal sentido, según datos obtenidos del SICOIN utilizando el usuario “prensa”; es decir, cualquier persona puede acceder a los datos que ahora presento, el presupuesto de gastos destinado al pago de deuda pública reporta una ejecución del 37.17%, el gasto destinado a administración el 29.06% y el gasto destinado a inversión pública una ejecución del 18.84%.
Al observar la ejecución por entidad del gobierno central, la mayor cantidad en términos absolutos fue de Q. 10,075.3 millones, equivalente a una ejecución del 24.65% asignaciones que corresponde a Obligaciones del Estado a Cargo del Tesoro, una figura que está bajo la responsabilidad del Ministerio de Finanzas Públicas, debiendo agregar a entidades como el Ministerio de Educación, servicio de la deuda pública, Ministerio de Comunicaciones, Ministerio de Trabajo y Previsión Social, Presidencia de la República, Procuraduría General de la Nación y Ministerio de Energía y Minas, con rangos de ejecución que van de 32.30% para el Ministerio de Educación a 10.14% ara el Ministerio de Energía y Minas.
Adicionalmente en la ejecución de los principales programas estatales, destaca el Fomento de la Salud y Medicina preventiva, la que ha logrado 32.25% como el de mayor nivel de ejecución y 3.44% del programa Infraestructura en Salud como el de menor nivel; considerando que los programas de Servicios de Imprenta, Apoyo para el Consumo Adecuado de Alimentos y Servicios de Información Sismológica, reportan una ejecución de 36.0, 41.14% y 34.36% respectivamente.
Debo destacar que Q21.295.9 millones fueron pagados con ingresos corrientes y Q3,730.2 millones fueron pagados con saldos de caja, que fueron las principales fuentes de financiamiento, reportando niveles de ejecución de 35.34% y 39.03% respectivamente.
No obstante que los porcentajes de ejecución son un criterio para el análisis, debe profundizarse en el análisis de la ejecución de los indicadores institucionales y metas físicas de 408 productos y 983 subproductos, toda vez que estos últimos constituyen el conjunto de bienes y servicios que el Estado entregan a la población guatemalteca; análisis que haremos en próximas entregas.