El presidente de Guatemala ha destituido a Jazmín de la Vega, ministra de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda, por incumplimiento de instrucciones. Esta acción se suma a la destitución de 2 ministras y 5 viceministros en los últimos 4 meses, además de una renuncia casi inmediata tras la nominación. La administración enfrenta crecientes retos en su equipo de alto nivel.
Surgen interrogantes críticas: ¿No delega el Presidente la responsabilidad de las carteras en sus ministros, incluyendo el criterio de a quien pagar? ¿Cómo supo exactamente a quiénes pagaron y quiénes no? El Presidente instruye a quien pagar?? Es esto una aceptación pública de que los pagos se manejan desde la Presidencia?
Estas dudas plantean si el comunicado evidencia una verdadera lucha contra la corrupción o, en cambio, refleja un enojo presidencial por no haber pagado a ciertos destinatarios específicos o cumplir con compromisos particulares.
