Los votantes del caserío de Dixville Notch abrieron la jornada de elecciones en Estados Unidos en los primeros minutos del martes, con un empate que refleja la paridad de las encuestas en la carrera a la Casa Blanca.
Kamala Harris y Donald Trump recibieron tres votos cada uno en la diminuta comunidad del estado nororiental de Nuevo Hampshire, que desde hace décadas inicia la jornada electoral en la medianoche del lunes a martes, horas antes de que abran los centros de votación en el resto del país.
La vicepresidenta demócrata y el expresidente republicano libran una batalla en una contienda excepcionalmente cerrada, con empates en la mayoría de las encuestas.
Las leyes de Nuevo Hampshire permiten a los municipios con menos de 100 residentes abrir sus centros de votación a medianoche y cerrarlos cuando se hayan registrado todos los sufragios.
Cuatro años atrás, los residentes de Dixville Notch votaron unánimemente por el entonces candidato Joe Biden, quien se convirtió en el segundo candidato en obtener todos sus votos desde 1960, cuando comenzó la tradición de sufragar a medianoche.