Un escándalo sacude al fútbol femenino en Sudamérica. Cuatro jugadoras del plantel femenino de River Plate fueron detenidas en Brasil tras ser acusadas de realizar gestos racistas durante el partido contra Gremio en el marco de la Ladies Cup 2024. El incidente ocurrió en el estadio Canindé de San Pablo, lo que derivó en la suspensión inmediata del encuentro y la eliminación del equipo argentino del torneo.
Según testigos y material audiovisual difundido en redes sociales, las futbolistas habrían realizado gestos que fueron interpretados como discriminatorios durante el partido, en lo que se considera un grave acto de racismo. La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) condenó de inmediato los hechos y, tras una rápida investigación, determinó la suspensión del encuentro. Como consecuencia de esta situación, River Plate fue excluido del torneo y sancionado con la prohibición de participar en futuras ediciones de la Ladies Cup durante los próximos dos años.
El incidente no solo afectó a River Plate, sino que también empañó la imagen de la competición, que busca promover el fútbol femenino en la región. La sanción impuesta al club argentino y la suspensión del partido son un claro mensaje en la lucha contra el racismo en el deporte, un problema que ha estado en el centro de la agenda de las principales entidades deportivas internacionales.